El Calar del Mundo
Uno de los parajes más impresionantes de Riópar es el calar del Mundo (de cuyas entrañas nace el río del mismo nombre, afluente del río Segura, a través de una gran cascada). La capacidad erosiva del agua ha esculpido un escarpado valle y diversas cuevas de formación cárstica, redes de túneles y vías de aguas subterráneas que emergen y desaparecen con la misma facilidad.
Los Chorros, donde nace El Mundo
En los impresionantes acantilados del valle de los Chorros se encuentra la cueva homónima que da lugar a una cadena de saltos y cascadas de más de 100 metros de altura, cuyas aguas reposan en pequeñas pozas o piscinas conocidas como calderetas. Cerca de allí, escondida entre los árboles, se encuentra la laguna de las Truchas, donde la visita se acompaña del canto de los pájaros y el chapoteo de la trucha común.
La Cueva de los Chorros, desde el punto de vista espeleológico, es una de las cavidades más notables de nuestro país. Esta gran cueva presenta una gran complejidad en sus conductos y galerías, estructuradas unas sobre diaclasas y otras sobre planos de estratificación. Se han topografiado más de 32.000 metros y su conocimiento es todavía incompleto. Bajo el aspecto espeleomórfico la cavidad presenta una entrada de grandes proporciones y un vestíbulo tapizado de bloques de origen clástico.La espectacularidad del valle de Los Chorros, tremendamente escarpado, es también obra del agua que labró los impresionantes acantilados.
Parque Natural desde el año 2005
En mayo de 2005 se crea el Parque Natural de los Calares del Mundo y de la Sima, con una extensión de 19.192 ha, puesto que la zona reúne unos grandes valores paisajísticos, faunísticos, florísticos y geomorfológicos para hacerla merecedor a de esta protección.
Riópar
Villa situada al suroeste de Albacete, posee un bellísimo entorno natural. Se encuentra a una altitud aproximada de 1100 metros. Su nombre proviene de la antigua población -de origen árabe- situada en los altos de un cerro y desde el cual se puede contemplar el valle de Riópar.
Ubicado en plena Sierra del Segura, junto a la Sierra de Alcaraz se encuentra el municipio de Riópar. Su historia comienza en tiempos de los romanos, que se asentaron en lo que hoy se conoce como Riópar Viejo, en lo alto de la colina. Más tarde durante el dominio visigodo Riópar formó parte de las posesiones del Conde Teodomiro. Los musulmanes también poblaron y enriquecieron esta tierra. Pasaron los años, y como en toda España de nuevo fue reconquistada, pasando de mano en mano entre los señores de la época.
Hacia el año 1213 Riópar gozó de una libertad administrativa que perdió en 1275, cuando pasó a depender de Alcaraz. Desde 1475 hasta su definitiva independencia en el siglo XIX, Riópar perteneció al condado de Paredes de Nava.